Los colores forman parte de nuestra vida diaria, pero siempre nos vemos más identificados con un color que con otro. ¿De qué color tienes las paredes de tu habitación? ¿Cómo es la ropa que tienes en tu armario? ¿De qué color sueles comprar los objetos para decorar tu casa?
Estamos definidos por colores a nuestro alrededor y siempre tendemos a sentirnos más agusto con unos que con otros, así pues, ¿sabías que los colores se asocian a la personalidad de cada uno?
A continuación te lo explicamos:
– Rojo: son personalidades activas, fuertes, optimistas con carácteres marcados y gran competitividad en el trabajo. Seguras de sí mismas con toques de impulsividad y necesidad de controlarlo todo. A veces poco reflexivos.
– Naranja: sociables pero con límites, no hay problema de estar rodeado de gente pero manteniendo cierto equilibrio y saber estar. Comprensibles y amigables. Bastante activos con necesidad de estar todo el día moviéndose o haciendo deporte. No excesivamente impulsivos pero con necesidad de estar creando cosas nuevas cada día.
– Amarillo: personalidades creativas que mantienen el sentido de la lógica con una imaginación práctica y racional. Son muy críticos consigo mismos y analíticos. Con facilidad a la concentración y atención. Suelen saber controlar sus emociones y ser muy exigentes con las personas de su alrededor.
– Verde: relajados y entregados a los demás. Les gusta estar rodeados de gente cercana y sentirse seguros y queridos al tener a una persona cercana. A causa de la dependencia de necesitar a alguien cerca, tienen miedo a ser heridos por ello. Positivos y deseosos de que los demás reconozcan sus esfuerzos.
– Azul: personas tranquilas con paz interior y equilibrio. Son fieles a sí mismos y no les importa lo que opine el resto de personas sobre ellos, no cambian ante las opiniones ajenas. Tienen mucha integridad y creencias fijadas.
– Morado: son ordenados, espirituales y muy sentimentales. Muy sensibles, pero ocultan sus heridas con facilidad cuando son dañados, prefieren no mostrar sus sentimientos en ese momento. Antes de decir en voz alta sus pensamientos, reflexionan y lo meditan bien. Están abiertas a ayudar y orientar a los demás.
– Marrón: personalidad acomodada a lo sencillo y lo natural. Prefieren una vida sencilla y cómoda rodeada de sus seres queridos. No son materialistas y prefieren las cosas minimalistas, no necesitan estar rodeados de cosas para ser felices.
– Gris: son personas conservadoras y tranquilas, algo frías y racionales que difícilmente llegan a enfadarse. Pasivas y rutinarias, pocas veces dejan sus costumbres para aventurarse a hacer cosas nuevas.