En la mayoría de las ocasiones no somos conscientes, pero tenemos asignados determinados colores a los objetos que normalmente son de un mismo tono. Lo que ocurre es que si cambian esa tonalidad es posible que nuestro cerebro siga manteniendo el color al que estamos acostumbrados y no sepamos distinguir la tonalidad actual de dicho objeto.
¿De qué color son las fresas?
Al igual que ocurrió con el fenómeno viral del vestido de color azul o dorado, un profesor japonés de Psicología ha hecho algo similar con una imagen de unas fresas a la que ha eliminado por completo los píxeles de color rojo. ¿Qué ha ocurrido? Que las personas que ven esa imagen siguen visualizando las fresas de color rojo, al que estamos acostumbrados a ver frecuentemente y el color que está directamente relacionado con ellas. Muchas personas siguen manteniendo que se trata de algún truco, pero la realidad es que existe un fenómeno llamado «la constancia del color» que hace que los objetos con un color predeterminado y clasificado de ese modo en el cerebro no dejan de tener ese color aunque cambien sus condiciones de luz. Por lo tanto, podemos decir que nuestro cerebro es mucho más inteligente que nosotros mismos, ya que se encarga de ajustar el color de los objetos previamente modificado para acercarlo a cómo se vería en unas condiciones normales.
Ahora queremos saber, ¿de qué color veis las fresas? ¿Realmente creéis que es objeto de nuestra imaginación que las veamos de un color que realmente no tienen? La psicología del color estudia los campos en los que los colores afectan a nuestro cerebro pero también como el cerebro afecta a los colores y nuestra percepción de los mismos.
Fuente: Motherboard